Originaria de Finlandia, la sauna es conocida por sus virtudes terapéuticas. Una sauna es un baño de calor realizado en una cabina de madera, que se caracteriza por circular en su interior aire a una temperatura entre 60º C y 100º C con un porcentaje de humedad baja. Con ello, se pretende que el sudor se evapore, sin que la piel llegue a calentarse demasiado.
La sauna provoca que el cuerpo expulse las toxinas, gracias a la circulación de aire caliente, ofreciendo numerosos beneficios a nuestro organismo. Al entrar en una sauna descubrirás que una sesión de sauna es todo un placer.
Si nunca antes has entrado en una sauna, te surgirán numerosas dudas sobre su uso. La principal de ellas es aquella que hace referencia a qué hacer antes de entrar a una sauna. Para tomar una sauna hay que tener presente una serie de consejos y pasos a seguir para que nuestra experiencia sea placentera.
Qué hacer antes de entrar en la sauna
¿Quieres saber qué hacer antes de entrar en una sauna? A continuación, te indicamos qué pasos a seguir para entrar a una sauna. Ya sea la primera vez que entras en una sauna o tengas experiencia previa, no te pierdas nuestros consejos.
Antes de entrar en una sauna hay que ser previsor. El cambio de temperatura entre el interior de la sauna y el exterior puede ser muy brusco, por lo que el cuerpo necesita acostumbrarse poco a poco. Seguidamente, te dejamos algunos consejos para tomar una sauna y que tu experiencia sea de lo más gratificante:
- En el momento de entrar en una sauna el estómago no puede estar vacío ni demasiado lleno. Antes de entrar en la sauna se recomienda hacer una comida ligera, como tomar alguna fruta, yogur o cereales.
- Antes de entrar en la sauna asegúrate de que tu organismo cuenta con una buena reserva de líquidos que ayuden a favorecer la sudoración. Puedes tomar agua, alguna bebida sin azúcar y sin gas o una infusión caliente. En todo caso, se desaconseja beber alcohol antes de entrar en la sauna.
- Quítate el reloj y los accesorios de joyería que puedas llevar encima (anillos, pulseras, collares,…). De esta forma, evitaremos posibles quemaduras producidas por el calor sobre el metal.
- Llegado el momento de entrar en la sauna se recomienda limpiar nuestro cuerpo con agua caliente y jabón. Posteriormente, debemos secar por completo nuestro cuerpo y, a ser posible mantener los pies calientes.
Cómo entrar en la sauna
Tal y como hemos podido ver en películas o series de TV, se puede entrar en la sauna completamente desnudos o cubiertos con una toalla. Si te preguntas «cómo entrar en la sauna», has llegado al lugar indicado. A continuación te indicamos cuál es la mejor opción.
Como especialistas en spa’s y saunas recomendamos entrar en la sauna completamente desnudos o cubiertos con una toalla de fibras naturales que permita la transpiración de la piel. Evita todas aquellas prendas que se peguen al cuerpo o que impidan la transpiración.
Si lo deseas, también puedes entrar en la sauna con el traje de baño o con un albornoz. No olvides llevar unas zapatillas abiertas o chanclas por razones de higiene y para evitar resbalar con la humedad del suelo.
No olvides llevar una toalla grande. Te servirá para ponerla en la tumbona o asiento de la sauna y para cubrirte con ella al salir de la sauna.
Pasos a seguir para entrar a una sauna
Una vez que hayamos preparado nuestro cuerpo para entrar en la sauna, vamos a indicar cuáles son los pasos a seguir para entrar en la sauna y disfrutar de todos sus beneficios.
Primera fase o fase de calentamiento
Podemos decir que, la primera fase, también conocida como fase de calentamiento, es la fase inicial de la sauna y que tiene una duración de 5 a 10 minutos.
Durante esta fase se recomienda estar sentados cómodamente con las rodillas dobladas y los pies a la altura del asiento o bien, colocarnos totalmente tumbados. Durante esta fase intenta relajarte.
Pasados estos primeros minutos podemos echar agua a las piedras calientes situadas en el interior de la sauna para aumentar la humedad y la sudoración.
Durante los últimos dos minutos nos colocaremos sentados, tocando con los pies el suelo para favorecer la circulación antes de salir de la sauna.
En el momento de salir de la sauna, hazlo lentamente para evitar mareos o bajadas de presión.
Segunda fase o fase de enfriamiento
Tras salir de la sauna, llega la fase de enfriamiento. Durante esta segunda fase de la sauna deberemos darnos un breve baño con agua fría. Puedes sustituir el baño por una ducha de agua fría o templada que tenga un tiempo de duración mínimo de dos minutos.
Si eres sensible a los bruscos cambios de temperatura te recomendamos optar por una ducha de agua templada empezando por los pies y subiendo hacia el tronco, hasta finalmente llegar a la cabeza. De esta forma evitaremos problemas de circulación.
Tercera fase o vuelta a la sauna
La tercera fase consiste en volver a la sauna. En esta ocasión, permaneceremos dentro durante unos 10 minutos para posteriormente volver a darse una ducha fría.
Por lo general, se recomienda realizar tres repeticiones para aprovechar los grandes beneficios del baño de calor o sauna.
Aunque no existe una única regla de cómo tomar una sauna, se recomienda no superar los 15 minutos por sesión y tomar pausas de enfriamiento de 10 a 15 minutos. La fase de enfriamiento debe durar tanto como la fase de calentamiento.
Fase final de la sauna
La última fase de la sauna o fase final consiste en tumbarse fuera de la sauna en una tumbona durante unos 10 minutos para relajarse y permitir que la presión arterial vuelva a la normalidad.
Aprovecha para beber líquidos durante esta fase, para devolverle al organismo el agua expulsada. En esta fase se recomienda beber agua, infusiones y zumos de frutas. De esta forma, no solo repondremos los líquidos perdidos, sino también las sales minerales.
En todo momento, en cualquiera de las fases de la sauna deberás prestar atención a las indicaciones de tu cuerpo. Escucha tu cuerpo e interpreta las señales que te envía. Si te sientes incómodo, notas mareo o maletas no dudes en salir de la sauna y descansar en un lugar fresco.
Qué NO hacer dentro de la sauna
Aunque algunas de las siguientes recomendaciones son obvias, nunca viene mal recordar qué no se debe hacer dentro de la sauna.
Para que tu experiencia en la sauna sea de lo más agradable, ten en cuenta los siguientes consejos:
- Nunca entres en la sauna con hambre o con el estómago lleno. Si has comido hace poco, espera mínimo una hora para entrar en la sauna.
- No entres en la sauna si estás agotado, muy estresado o te sientes mal.
- Dentro de la sauna no bebas líquidos. Ni siquiera agua. Espérate a salir de la sauna para reponer los líquidos perdidos, tomando agua, infusiones o zumos.
- No realices ejercicios dentro de la sauna ni molestes al resto de usuarios con los que compartes el espacio.
- En ningún momento deberás frotar tu piel para aliviar el sudor.
- Después de la sauna no te duches con agua caliente.
- No realices más de tres sesiones de sauna ni estés más de 15 minutos en su interior.
Si quieres saber más sobre los beneficios de las saunas, así como su uso correcto, no te pierdas nuestro artículo: “Beneficios de la sauna, tipos y consejos prácticos”. Por nuestra parte, esperamos haberte sido de ayuda para entender qué hacer antes de entrar en una sauna.
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