Actualmente, relajarse se ha convertido en todo un desafío difícil de vencer a causa del estrés de la vida cotidiana. Por eso, cada vez son más lo que optan por dedicar sus momentos de ocio o de dispersión a la búsqueda de la calma, retirados de la vida bulliciosa y dedicados casi en exclusiva al cuidado del cuerpo y la mente. Y es en este punto donde entran en juego los spas.

Hace años, los balnearios eran de los pocos lugares en los que se podían llevar a cabo determinados tratamientos terapéuticos naturales para curar enfermedades o mejorar dolencias crónicas. La mayoría fueron construidos en España durante el siglo XIX y se asociaban normalmente a las propiedades de manantiales cercanos.

Sin embargo, hoy en día han ido surgiendo otros centros de belleza y salud diferenciados de los balnearios, los denominados spas. En otro post relacionado La increíble historia del origen de los Spas puedes conocer de dónde viene su etimología (se cree que procede del acrónimo latino salus per aquam) y cuál fue el primero. En este caso, solo te vamos a explicar en qué consiste.

Al igual que los balnearios, los spas son centros que utilizan los beneficios del agua para mejorar la salud y el bienestar corporal y mental. La mayoría de los spas se ubican en las ciudades, para que en cualquier momento del día puedas relajarte y disfrutar de una sesión wellness, pero también fuera de ellas, en entornos más naturales e incluso muchos ofrecen la posibilidad de hospedarte en un confortable hotel.

En líneas generales, un spa consta de la siguientes instalaciones:

• Piscina interior climatizada con camas de burbujas, cuellos de cisne a presión, jets de masaje, zona de nado a contracorriente, fuente central, asientos con microburbujas…
• Jacuzzi de agua caliente
• Pozo de agua fría
• Duchas de sensaciones (cubo de agua fría, cromoterapia, aromaterapia, escocesa, bitérmica…)
• Pediluvio
• Sauna Finlandesa
• Baño Turco o Hammam
• Cabina de hielo
• Tumbonas
• Sala de Relax
• Piscina exterior
• Cabinas para tratamientos: masajes, peelings, rituales…

¿Y tú, incluyes al spa como una visita obligada para olvidarte del estrés y relajarte?