En este artículo te cuento cómo benefician los poderes ocultos de la Luna a tus rutinas de belleza y al estado de tu salud.
Y es que aunque la mayoría de la gente cree que la luna solo tiene cuatro fases, en realidad tiene un total de… ¡ocho!
- Luna Nueva: la cara visible de la Luna queda sumida en la oscuridad y no la vemos.
- Luna Creciente: se aprecia un pequeño hilo de Luna iluminando el cielo.
- Cuarto Creciente: muestra la mitad de su cara visible iluminada.
- Luna Gibosa Creciente: se encuentra convexa y parece una joroba.
- Luna Llena: está completamente visible y brilla más que nunca.
- Luna Gibosa Menguante: perfil más convexo, ya que empieza a menguar.
- Cuarto Menguante: como en el Cuarto Creciente, muestra la mitad de su cara visible iluminada.
- Luna Menguante: está cóncava.
A pesar de que pueda parecer del ámbito de la superstición y la mitología de nuestros antepasados o de tribus ancestrales que basaban su ritmo de vida en función de la Luna…
¡Sí que cada fase nos puede afectar de una forma diferente!
Cómo influye la luna en el ser humano
Al igual que incide en las mareas y la naturaleza en general (en el mundo animal, por ejemplo: cambios hormonales, períodos de reproducción…), también tiene influencia en el ser humano, aunque muchos de esos síntomas no se han podido probar científicamente, como por ejemplo, las teorías de que, durante la Luna Llena tienen lugar más intentos de suicidio, violencia o comportamientos extraños.
No obstante, sí que se han realizado algunos estudios al respecto que han demostrado, por ejemplo, que la Luna influye en:
- Los ciclos de sueño, favoreciéndolos o dificultándolos.
- El estado emocional y físico de las personas.
- La reproducción humana: la fertilidad, la menstruación, la natalidad.
El caso es que la influencia gravitacional que ejerce la luna sobre nosotros y nuestro sistema nervioso puede hacer que nuestro comportamiento varíe, mostrando más irritabilidad o exasperación e, incluso individuos con personalidades inestables, pueden experimentar mayores consecuencias personales y sociales.
Y es que cuando la Luna se encuentra más cerca de la Tierra es cuando tienen lugar más desarreglos en los que la habitamos, especialmente en los excepcionales casos de súper lunas, cuando la fuerza gravitacional es mucho mayor.
Cómo influye la luna en el ámbito de la estética y la salud
En el ámbito de la estética y la salud, también se considera que la fuerza gravitacional lunar tiene un efecto similar al que se le atribuye en relación con la subida y bajada de las mareas, considerando, por ejemplo, que el pelo crece más fuerte en una determinada fase de la luna o que si queremos que crezca más sano debemos cortarlo en otra frase específica.
Cuándo realizar tratamientos según la fase lunar
En líneas generales, se considera que un buen momento para cortar el cabello es entre la Luna Nueva y la Luna Llena, símbolo esta última de regeneración. Además, el inicio o final de ciclos lunares junto con los cambios de temporadas astrales pueden llegar a marcar nuestro biorritmo.
Por ejemplo, durante la fase de la Luna Creciente, es un buen momento para comenzar tratamientos de belleza:
- Corporales.
- Aplicarnos cremas.
- Realizarnos cuidados en las uñas, ya que estarán más fortalecidas;
Mientras que en la Luna Menguante, es momento de:
- Ir oxigenando nuestro cuerpo.
- Comenzar regímenes de adelgazamiento.
- Aplicarnos mascarillas y exfoliantes.
- Realizarse la depilación…
Y es que aunque la ciencia se muestre reticente a aceptar la influencia de las fases de la luna en los seres vivos, fruto del escepticismo propio que siente hacia las leyendas y mitos, es complicado ignorar completamente que las mareas, los océanos, los ciclos animales… siguen la fuerza gravitatoria de la luna y, por lo tanto, no resulta nada descabellado que también influya directamente en los seres humanos.
Y tú, ¿qué piensas? ¿Vas a hacerte algún tratamiento de belleza dependiendo de la fase lunar? Aquí puedes encontrar muchas ideas para realizarte tratamientos de belleza.
Imagen: Drew Tilk