Vivimos en un mundo en el que cada vez más personas desean disfrutar de un estilo de vida saludable. Esto es fácil de decir pero, en la práctica, difícil de llevar a cabo, porque estamos demasiado ocupados yendo con prisas al trabajo, al supermercado, limpiando continuamente la casa, quedando con amigos, haciendo otras actividades, estudiando, etc.
Afortunadamente, existen 4 formas de reconducir este tipo de vida a uno mucho más saludable para ti y toda la familia:
- Tomar más frutas y verduras.
- Beber (al menos) 2 litros de agua cada día.
- Ser más activo (subir las escaleras en lugar del ascensor o aparcar más lejos del trabajo, etc.)
- Tomarte tiempo para ti (caminar por la naturaleza, hacer un retiro, darte un masaje, leer, etc.).
En este artículo, quiero mostrarte cómo alimentarte de una forma sana fácilmente.
Para ello, voy a compartir contigo unas recetas que me han ayudado a consumir mis raciones de frutas y verduras en las cantidades diarias recomendadas.
¿Sabes qué es lo mejor de todo? ¡Qué solo necesitarás los ingredientes y una batidora!
Beneficios de consumir smoothies de frutas y verduras
Consumir smoothies (batidos) de verduras es una buena forma de empezar el día, recuperar la energía después de entrenar, calmar la sed o simplemente disponer de un tentempié saludable para llevar. Sin embargo, para mí, la razón para tomar estos batidos es que están cargados de beneficiosos nutrientes para el cuerpo.
La bebida mágica todo en uno
El mayor beneficio de un smoothie es que te permite consumir prácticamente todas las porciones de verduras diarias de una sola vez. Es bueno saber que es recomendable tomar alrededor de 9 piezas de fruta y verdura al día (siendo las verduras superiores siempre a las de las frutas) y el punto fuerte de los batidos es que puedes tomar la mayor parte de ellas en un solo vaso.
Corazón, dientes y piel saludable
Todos los antioxidantes (como las vitaminas A, C y K), calcio y agua que ingieres con tu batido mágico diario influirán directamente en tus huesos, corazón y piel, que se sentirán enriquecidos y notarás la diferencia. No solo te sentirás bien, sino que también tendrás menos predisposición a sufrir un ataque al corazón o un infarto; bajarás el colesterol (malo)y tu piel se mostrará hidratada y envejecerá más lentamente.
Un smoothie al día mantiene al médico alejado
Lleno de fitonutrientes, tu smoothie diario fortalecerá tu sistema inmune y te ayudará a mantener al margen las enfermedades todo el año.
Reduces los antojos
Cuando consumes smoothies, tienes menos antojos de comidas altamente procesadas, ya que se digieren más lentamente y no producen picos de insulina que hacen que se abra el apetito.
Eso sí, cuando vayas a preparar el batido, ten en cuenta esta fórmula que hará que tu percepción cambie de desagradable a delicioso automáticamente: utiliza 60% de frutas y 40% de verduras. Además, si quieres convertir tu smoothie en un súper smoothie, prueba a añadir superalimentos como semilla de chía, cáñamo, lino o calabaza, mantequilla de almendras, proteína vegetal, açai en polvo, canela, etc.
En cualquier caso, no todos los vegetales pueden comerse crudos, así que para ponértelo más fácil he hecho un listado con las verduras y las frutas más deliciosas que puedes utilizar sin ninguna preparación para crear el smoothie de tus sueños.
¡Clica sobre tu color favorito y descubrirás un smoothie con esa tonalidad! ¡Todos riquísimos!
- 3 zanahorias o 20 gramos de calabaza
- 1 plátano
- 100 gramos de papaya
- 1 pera
- Jugo de medio limón
- Una pieza de jengibre fresco
- Leche de avena, almendras o soja o agua
- 3 zanahorias o 20 gramos de calabaza
- 1 plátano
- 100 gramos de papaya
- 1 pera
- Jugo de medio limón
- Una pieza de jengibre fresco
- Leche de avena, almendras o soja o agua
- 1 tomate o pimentón rojo
- 1 granada
- 1 plátano
- Una pieza de jengibre fresco
- Leche de avena, almendras o soja o agua
- 1 tomate o pimentón rojo
- 1 granada
- 1 plátano
- Una pieza de jengibre fresco
- Leche de avena, almendras o soja o agua
- 1 remolacha (cocida o cruda) o 6 rábanos
- 1 plátano
- 1 taza pequeña de fruta roja (por ejemplo fresas, frambuesas, arándanos, uvas, etc.)
- Jugo de medio limón
- Una pieza de jengibre fresco
- Leche de avena, almendras o soja o agua
- 1 remolacha (cocida o cruda) o 6 rábanos
- 1 plátano
- 1 taza pequeña de fruta roja (por ejemplo fresas, frambuesas, arándanos, uvas, etc.)
- Jugo de medio limón
- Una pieza de jengibre fresco
- Leche de avena, almendras o soja o agua
- 50 gramos de espinacas o col rizada
- 50 gramos de pepino
- 1 kiwi
- 1 manzana verde
- Jugo de medio limón
- Una pieza de jengibre fresco
- Leche de avena, almendras o soja o agua
- 50 gramos de espinacas o col rizada
- 50 gramos de pepino
- 1 kiwi
- 1 manzana verde
- Jugo de medio limón
- Una pieza de jengibre fresco
- Leche de avena, almendras o soja o agua
- 1 endibia (saque la parte dura)
- 1 plátano
- 1 pera
- 1 manzana amarilla
- Jugo de 2 naranjas
- Leche de avena, almendras o soja o agua
- 1 achicoria (saque la parte dura)
- 1 plátano
- 1 pera
- 1 manzana amarilla
- Jugo de 2 naranjas
- Leche de avena, almendras o soja o agua